Generosidad incomprendida.
Gonzalo Moliner, presidente del CGPJ (una cosa de jueces), «Viajar en turista no da una buena imagen», cuando dijo esas palabras no recibió más que críticas, uno está un poco hasta los huevos ya de la gente, ¿acaso se paga así la generosidad en este país?, si por el fuera viajaba en burra, pero no, se sacrifica, prefiere viajar en primera, con comodidades que le asquean, ojo, por la buena imagen del país.
Pero la gente no es agradecida, ya puedes pasarte la vida dándolo todo por los demás que está más que comprobado que al final lo que triunfa es el egoísmo, y de eso irá esta entrada de hoy, mas no de estos maravillosos seres que nos juzgan, gobiernan y demás, no, es más cosa de andar por casa, aplicar el mismo concepto a la vida doméstica.
Me acuerdo yo, al poco de nacer la cría mayor, que la parienta tuvo un bonito detalle conmigo, resulta que claro, sabréis de sobra que está científicamente probado que el instinto maternal es eso, «maternal», de madre, pues una noche estaba yo ahí plácidamente dormido, desperté y me encontré a la moza con unas ojeras de campeonato, uno, de ser poco sensible, hubiera dicho algo acerca de su aspecto, pero no, que soy buen tipo, me callé.
Me miró, «qué, ¿no dices nada?», «menuda noche la niña, no ha pegado ojo, ni yo tampoco, y tú ni enterarte, y mira que te he dado codazos», jo, emotivo, se me saltaban las lágrimas y todo, qué detallazo, ella ahí oyendo a la niña llorar, gracias a ese instinto maternal, levantándose diez veces a acunarla, disfrutando del momento madre-hija, pudiendo dejarme al margen, pero no, qué va, intentó llamarme, por desgracia uno, salvo unas ligeras molestias en la espalda, no sintió nada, mientras ella disfrutaba de toda una noche con su bebecita yo tuve que conformarme con roncar y echar la babilla.
Pero lo importante es el detalle, me jode que no insistiera más, me jode no tener esa capacidad de oír el llanto de los bebés, pero no puedo culpar a la moza más de lo necesario, porque ella intentar lo intentó, eso me descubrió algo, debo de ser más generoso con mi esposa en el día a día, y me puse a ello.
Así que por las mañanas, en vez de hacer labores domésticas, planchar, aspiradora y demás, me limité a tocarme los cojones en el sofá viendo la tele, sí, ya sé que es complicado evitar la tentación, porque ya antes de llegar a casa tras el café y el pincho de tortilla ya andas ansioso por ponerte a limpiar los baños ahí con cristales incluidos, pero por respeto y ojo, sobre todo por amor, hacía mi santísima moza, uno se sacrifica.
Claro, no todos los sacrificios son entendidos como dios manda, al igual que al Sr. Moliner a mí me pasó algo similar, es más, puede que tú, según leas esto, pienses, «menuda jeta tienes macho», no no, ojo, comprendo que lo pienses, de hecho mi mujer pensaba igual, llegó a casa y al explicarle mi generoso acto matutino se puso como una fiera (y no me refiero a nada sexual), ¿tú te crees que hasta me insultó?.
Y ahí entra la explicación, porque lo correcto es que cuando algo se malinterpreta se explique como dios manda.
«Querida, mi amadísima compañera de viaje en la vida, oh mi dulce damisela rescatada por el apuesto príncipe de las garras de bruja bigotuda (esto la verdad es que la encendió más, no sé por qué), déjame explicarte cariño, ¿acaso no estás siempre con tus amigas criticando la cantidad de lobas y busconas robamaridos que hay en el pueblo?, ¿acaso no tienes ya miedo de que te roben a tu príncipe?, ¿acaso no es tu príncipe ya de por sí un ser guapo y apetitoso para esas busconas de carnes prietas?, pues imagina si encima de ser guapo, simpático, culto y sensible hago tareas domésticas, te me roban fijo mi amor, ya sería el objetivo de todas esas indeseables, de esta manera, aunque me duela en lo más fondo, podrás decir por ahí que no soy perfecto, y nuestro matrimonio será salvado.»
Venga, no me digas, mayor acto de amor y generosidad no puede tener uno en esta vida, ¿tú te crees que me dio la razón y en agradecimiento, antes de ponerse a pasar la aspiradora, que falta hacía por cierto, me llevó a la cama y me echó un polvo como mandan los cánones?.
Asómbrate, qué va, me soltó una hostia, increíble, pues nada, «te jodes» le dije (muy bajito para que no me oyera), a partir de ese día ni café tomaba, dejaba a las niñas en el cole y me tiraba cuatro horas diarias marujeando, ójala te arrepientas cuando vengan en cola todas las busconas a quitarte el marido, que han pasado ya ocho años y no vino aun ninguna, pero dales tiempo.
The Poodles para la espera, «Cuts Like a Knife».
Tu sigue pasando la aspiradora y planchando y limpiando los baños y no pierdas la esperanza, que seguro que llegan te lo digo yo.
¡Pero no puedes dejar de marujear! Tú sigue que un día te levantas y vas a flipar de la cantidad de mujeres jóvenes, prietas y salidas están a la puerta esperándote.
Besazo Maestro
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Y ese día se arrepentirá, y no podrá decir que uno no hizo todo lo que está en su mano para evitarlo, pero en fin, hay que reconocer que es un poco egoistona 🙂
Besos guapa.
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Por eso no saco yo tan buenas notas como lo hacía en el instituto, para que los que me rodean no se sientan abrumados por mi increíble intelecto. Además, soy la pequeña de mis hermanos. Si tardo más en sacarme la carrera menos tiempo dejaré a mis queridos padres solos.
¿Tú piensas que alguien me apoya al respecto? ¡Qué gentuza!
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Ahí ahí, es que no te entienden, yo que tú ni lo explicaba, me sacrificaba en silencio, total, lo importante es el detalle, que tu madre sienta al retoño a cuidar cerca, yo te entiendo perfectamente querida mía, yo también era el pequeño, sigo siéndolo, pero claro, decir que eres el pequeño con la edad que tengo…
Debes ver, si no la has visto, «El año de la Garrapata», te gustará 😀 es de esas pelis que reflejan estas cosas a la perfección.
Besos reina.
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Es lo que tiene ser bueno. Que como la bondad no abunda, la gente no sabe apreciarla.
Un abrazo.
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Al contrario, te vilipendian, solo se valora el egoísmo, ir de bueno por la vida no te trae más que disgustos.
Abrazo bat.
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Dess, te comprendo perfectamente.
Yo soy la envidia de las amigas de mi santa, y sus maridos son mi envidia, ja, ja 🙂
Un abrazo
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Y seguro que a ellos nadie les intenta robar y a tí sí, y luego vienen las lamentaciones claro, en fin, que jueguen con fuego…
Abrazo.
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Ese marido tiene los días contados, ¿los días? ni segundos le quedan. Hoy mi saludo es para tu compañera de viaje o tu ex, que a estas alturas merecido te lo tienes. ¿Por qué para ella? Las palabras sobran, pero en toda esta historia ella ha demostrado que es madre y en un día como hoy se lo merece.
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Sí, esta mañana se lo hemos demostrado como mandan los cánones, le hemos escondido los regalos y hemos ido dejando pistas por toda la casa, nos ha puesto a parir pero las niñas y yo lo hemos pasado de cojones 😀
Yo ni me planteo que algún día sea «ex», de hecho ya llevamos juntos muchos más años de los que esperaba, ahora, ten en cuenta que la gran mayoría de cosas que cuento en el blog no tienen que ver con la realidad, en el fondo soy bastante majo
Felicidades si eres madre, si no también, por ser tan guapa.
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Es difícil para las mujeres reconocer la generosidad de sus consortes y le echan en cara todo, todo, y claro no sabes que hacer, yo te comprendo.
Gracias Maestro 🙂 .
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Uno no quita los cacharros del lavavajillas para que se ahorre el gimnasio y haga ejercicio y encima le llaman vago, qué le vamos a hacer, no se las puede contentar de ninguna manera 😀
Abrazos.
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Jajajajaja Pobrecito incomprendido!!! Y es que somos todas unas pajaras de cuidado, ya te lo digo yo… Si no han venodo a por ti las busconas es porque te falta el detalle de salir al balcon con el plumero en ristre y un «sucinto» delantal (exclusivamente)
Jajajajaja me parto yo sola!!!! Besazo infernal querido 😀
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Pájaras ya no diría yo, sí que os falta comprensión y agradecimiento ante el sacrificio ajeno, no malinterpretar las cosas vaya 😀
Besos guapa.
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Tú insiste, que algún día esas lagartonas se darán cuenta de tu valía y vendrá a por ti con las bragas en la mano. Mientras tanto, mira a ver si me puedes planchar la camisa blanca, que mañana tengo juicio. 😛
Un abrazo, crack.
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Pues así en bajito te diréque mañana me toca plancha 😀 y tengo para dos capítulos al menos.
Abrazos.
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Pero tú no has visto que todos los días hay una cola de cojones (ejem) en la puerta de tu casa y salen por patas en cuanto ven a tu «santa» con la escoba en la mano???? A ver si es que hay que graduarte la vista y eso… (y va el 2º comentario)…
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Pues mira que no las vi no 😀 ya me imaginaba a mí que no vinieran, me quedo más tranquilo.
Besos.
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Pues ya me explicará usted el método de no escuchar a un pequeño bambino dando la murga habitual de los lactantes, porque a mi me resultó imposible, claro que a mi me molesta por la noche hasta una araña tejiendo su telaraña a dos kilómetros.
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Yo te diré que asfaltaron la calle donde vivía, entonces, y ni me enteré, cuando cierro el ojo no suelo tener problemas, el problema es que tengo poco tiempo para cerrarlo, o quizá es por eso por lo que lo aprovecho 😀
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No sé por qué, pero al leer tus historias conyugales me acordé de Pedro Picapiedra y Vilma.
El juez se olvidó de mencionar un detalle de la clase turista que es aún más importante que el de la (mala) imagen que da viajar con el populacho: no tienes espacio para estirar las piernas. Yo la última vez que cogí un avión fue para ir a Merkelandia (cinco horitas de nada desde aquí abajo) y te aseguro que al cabo de un rato empiezas a sentir un hormigueo subiéndote por las extremidades inferiores (o a lo mejor eran mis neuras con el «síndrome de la clase turista», o es que soy un «culo de mal asiento»). Así que salí varias veces al pasillo (condenadamente estrecho, por cierto) desde mi puesto junto a la ventanilla, importunando de paso a algún orondo teutón que me tocó de compañero de fila y a las simpáticas azafatas, que te sortean como buenamente pueden. Un sin vivir, oiga, no se lo recomiendo a nadie.
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Ya, lo sé, lo viví en carnes propias, hay aviones que están hechos para patascortas, por eso le entiendo, aunque ojo, él no puso excusas, refiriose a la imagen del país, no le importaban sus piernas, le importábamos todos… ejem.
Abrazos mozo.
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Sí, este país apesta. Personas tan ejemplares como ese juez que se sacrifica por nosotros viajando en primera clase, para no dejar nuestra maltrecha imagen a la altura del betún, son puestos en la picota. Banda de desagradecíos e hijos de su santa… Haces bien en reivindicarlo ¿Para cuándo un post sobre la Cospe, con velo y mantilla si puede ser? ;D
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Habrá que ponerse, aunque no soy muy de hablar de políticos la verdad, no sé si llegan a 10 las entradas de politiqueo, pero la Cospe lo merece, por morbosilla 😀
Abrazos.
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Jajajajajaja… magnífico señor D!!! es usted un As… dígale a su señora esposa de mi parte que lo cuide, y que le esconda las sartenes, no vaya usted a seguir en ese hábito molesto que se llama cocinar.
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Cocinar y lo que es peor, fregar luego la sartén 😀 ya lo que nos faltaba, que supiera cocinar, que así te diré, en confianza, que sé y no se me da mal ojo.
Besos reina.
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Pues yo tampoco cocino mal señor D, pero no soporto el fregado… En casa hay una ley: el que cocina no friega… y yo, de pilla, trato al menos freir siempre una tortilla.
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A mí me toca todo, ella a mesa puesta, ¿tú te crees?, habrá que hacernos un curso de tortillas, te advierto que a mí a hacer tortillas es complicado ganarme.
Besssos.
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jejejjejej, que bueeeenoooooooooo TODO, pero me has rematado con el «te jodes…muy bajito», como los niños maldiciendo a sus padres, pero con precaución, para que no te suelten otra hostia XD))
Gracias por traer a mi mente esos bonitos recuerdos!!!
Me tienes partida en 2 de la risa, ¡lo sepas!!
Besitos desde el cariño 😀
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En el fondo, estoy convencido de que eres un buen marido………Cuidate
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Lo soy, vamos, que me considero tal, aunque parezca lo contrario, hay mucho de ficción en todo lo que digo.
Abrazos.
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Tienes mas morro que espalda! Dile a tu parienta que la acompanio en el sentimiento jaja 😛
Mas besos, sinverguenza
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¿Ves?, es que no sabéis apreciar un acto generoso, os quedais en la primera impresión sin entrar a valorar el fondo del asunto, besotes queridisima.
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Si de algo peco, es de superficial
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En el fondo eres un padrazo,un maridazo y encima ni te lo agradecen jajajaa.Lo único que te queda por hacer,creo que es disimular y hacer como que haces…jajajaa.Es que no quiero reírme pero es inevitable.Ten cuidado que algún día te raptan.Besos Dessjuest
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Ni lo más mínimo se me agradece el esfuerzo, a veces dan ganas de ver a qué precio van los bajos de los puentes 😀
Besos.
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Quizá entienda a mi santo, que como tú, ha hecho algunas épocas de las labores domésticas su queja de que «no le aprecio lo suficiente»… ahora que las hago yo, aparte de criar, sí que le aprecio mucho más, sí. A él y a todos los que lo saben hacer de verdad y no es de boquilla!
Que sepas que te leo mucho más de lo que llego a comentar, pero bueno, la vida y sus ajetreos. Un beso, vascuence!
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Bueno, lo importante es que el crio llore como mandan los cánones y puedas explayarte en el instinto maternal 😀 recuerda eso, que es maternal, que al jefe mejor le dejas en el parque con la niña.
Besos reina.
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Pobrecito, qué desconsiderada mujer.. yo creo que tu eres tan calzonazos que por eso escribes estos posts, para sentirte mejor jijijijijijijiji
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Sí, es parte de la terapia, en realidad soy el campeón de los cojonazos, ni la perra me tiene el mínimo respeto 😀
Besos querida.
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