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Posts Tagged ‘Rome’

Sólo Antonio puede conquistar a Antonio.

Dice Emy que en un blog serio que se precie no puede faltar una entrada dedicada a Marco Antonio, yo siempre la hago caso, por lo que aquí están las letras dedicadas a ella y a uno de los tipos más recordados de la república romana y claro, de la época en la que esta dejó de existir, curiosamente yo siempre he sido de quienes piensan que fue la muerte de Marco Antonio el punto definitivo en el cual comienza la era de los emperadores.

Claro, mira que ha salido veces en el cine, en documentales, en series de la tele, pero uno tras ver esa maravilla llamada «Rome», pues me da que siempre que piense en el hombre este lo haré poniéndole la cara de James Purefoy, y por eso en la fotica sale el actor inglés. De él y de otros personajes históricos que aparecen en la serie ya te hablé así en serio en una entrada sobre errores históricos de la misma, por cierto, esta serie es claro ejemplo de cómo cambiar la historia se puede hacer hasta bien.

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Os presento a mi amante.

HBO, logo Tú te preguntarás, ¿por qué veo tantas series?, bien, durante un tiempo mi trabajo me obligaba a viajar, ciudades diversas, pero yo como suelen decir los futbolistas, de esas ciudades sólo veía los hoteles, tú te volverás a preguntar, ¿por qué atlética y varonil persona?, pues a eso no te voy a responder, debería para ello dar datos de mi trabajo que no estoy por la labor, nunca se sabe quién te lee y desde luego no quiero ir al paro, la cosa es que mi sentido de la profesionalidad me impedía salir a la calle, entonces, tenemos noches de hotel, algunas compartidas (sin sexo lamentablemente), otras solitarias, otras en las que desearía estar solo por quien tenía al lado, en la tele nada más que mierda, el cine siempre es una opción, de hecho es a lo que me daba, portátil y peli antes de dormir, hasta que un día alguien me dijo, «¿por qué no te ves una serie?, te enganchas y tienes garantizadas unas horas de cierta diversión», ahí nació mi pasión por esas pequeñas joyas televisivas, un mero pasatiempo hasta que me topé con mi amante, quien más me ha hecho gozar de la noche, te he hablado de ella bastantes veces, la muy puta se llama HBO.

No te voy a hablar de los orígenes del canal, de su historia, para qué, os voy a hablar de sus polvazos, polvazos que en la mayoría de los casos me han dejado satisfecho, variados, intensos, algún gatillazo tuvimos, cierto, nadie es perfecto, pero por lo general siempre han sido de recordar, y como quisiera que tú también goces pues nada, te contaré esos polvos, porque además, para qué andarnos con rodeos, no soy celoso, te puedes tirar a la HBO las veces que quieras, sin problema. Dices tú de orden, qué se yo, podría hacerlo por orden alfabético, sí, podría hacerlo por lo que más me ha gustado, pero sería complicado, al final decidí preguntar a mi hermoso par de testículos cómo lo harían ellos, y lo que han decidido mis pelotas es esto:

«The Wire»: Te he hablado mucho de ella, es complicado que te encuentres con alguien que la haya visto y no te diga que es la mejor serie que ha visto en su vida, compleja, un desnudo integral de la sociedad actual, serie de ficción que te crees más que viendo cualquier documental, completa, distinta, maravillosa, una joya cuyos seguidores adoran y que sin embargo ha permanecido oculta para el gran público, en cualquier otro canal se hubiera cancelado, fue un fracaso de audiencias, pero HBO la mantuvo, la mantuvo además sin presionar a los creadores para cambiar nada, gracias a esa paciencia tenemos la que sí, sin duda alguna es la mejor serie de televisión de la historia, sin más, no hay discusión, perfecta.

«OZ»: Tú te dirás qué hago viendo yo cuentos infantiles, no, nada de eso, es más, «OZ» puede que sea la menos indicada de todas para un niño, rodada prácticamente en interiores, en una cárcel, es la serie que más me impresionó, por lo arriesgada, un drama carcelario crudo y duro, con escenas que te impresionan, no es, ciertamente, la más realista visión de una prisión, pero sí la más explícita, pobres actores, muchos de ellos los hemos vuelto a ver, esta serie fue la pionera, la primera que rodó HBO, ya ahí dejó a las claras su intención de pasarse por el forro de los cojones el puritanismo, si echamos desnudo al preso dentro del agujero se ve al preso desnudo, si se viola se viola, si se mata se mata, moralidad cero, la que cada uno tenga.

«Los Soprano»: Quizá la que menos presentación necesite, un homenaje al cine gangsteril, a «El Padrino», a «Goodfellas», es la de más éxito del canal hasta la llegada de los Stark, sigue la senda de sinceridad de todas las anteriores, el gusto por rodar escenas como se deben rodar, poco de decir de ella, que es todo un mito televisivo, repleta de grandes momentos, repleta de grises, muy de personajes, los llegas a adorar, aunque la mayoría sean unos hijosdeputa, da igual, geniales.

«Roma»: Viajar al mundo antiguo, si encima la época, la antigua Roma, te apasiona, pues miel sobre hojuelas, pero es que «Roma» tiene calidad, mucha, claro ejemplo de cómo se puede ser fiel a una época, a unos hechos, a unos personajes y a una ciudad cambiando mucho de lo que pasó, es, como todas, dura, la visión más realista de la grandeza y miseria de una época, pero además entretenida, impecable en todos los aspectos, disfrutable de todas todas, como suele pasar, está tan bien hecha que no pudo seguir adelante, requería de demasiado presupuesto, aun así, dos temporadas imprescindibles.

«Deadwood»: Un viaje al lejano oeste, a la frontera, estás viéndola, pasa al galope un caballo por la calle y te tapas la cara, no sea que te salpique de mierda, quizá la mejor ambientada de todas (y esto es decir mucho), quizás la menos densa, la que explota el lado más de comedia, sin serlo, quizá la que tenga el personaje que más se te queda grabado a fuego, Al Swearengen, otra de las canceladas, por los mismos motivos que prácticamente todas, serie cara, demasiado cara, pero es que la calidad tiene su precio, desde luego es algo que debería ver todo amante del género, con escenas donde te ríes, donde te emocionas y donde llegas a mirar hacia otro lado, por la crudeza extrema y la escasa moralidad.

«Boardwalk Empire»: Años 20, ley seca, mafia, si te hablo de ambientación me repetiría como el ajo, es algo que ya debemos dar por supuesto en toda serie del canal, he de decir que su primera temporada me dejó más bien frío, veía reflejadas en la serie todas las señas de identidad de HBO, pero faltaba algo, faltaba el segundo acto, el que te deja con la sensación de haber vivido una grandísima historia, es quizá la mejor escrita de todas, realmente adictiva, sorprendente, nada de lo que pasa pasa como tú esperabas, esta es de las que están en curso, por lo que es previsible que a pesar de su precio se mantenga, ojala, porque lleva camino de convertirse en una serie mítica.

«Juego de Tronos»: La que más me sorprendió, uno no es mucho de historias de esas tipo medieval, con sus dragones y tal, pero viendo el sello había que verla, acojonante, acojonantes sus diálogos, impagables, acojonantes sus personajes, perfectos, acojonantes los actores, la perfección hecha televisión, es más, ha roto todos los récords de venta en DVD de HBO, por algo será, claro ejemplo de cómo hacer creíble una historia tan fantasiosa, quizá la novela perfecta para el canal, por su falta de moral, siempre es complicado llevar libros a la pantalla, pero esta es la prueba de que cuando hay gente capaz se puede hacer más que dignamente, como la anterior esta es de las que aun está en emisión, esperemos que por muchos años.

«Hermanos de Sangre»: La serie bélica por excelencia, una sola temporada, rodada magistralmente, siguiendo todos los pasos necesarios para que te creas parte de la compañía “Easy”, puro espectáculo, se nota la mano de Spielberg en ello, rodada con menos medios que la fallida «The Pacific», pero en ningún caso notas nada cutre, tiene tiempos para todo, evidentemente los combates, pero también el amor (creo que pocas veces veremos metida una historia de amor de manera tan perfecta en medio de una batalla), el drama más duro de los campos de concentración, compañerismo, le falta algo de realismo, cierto es, pero con todo lo que te digo, se antoja complicado que una serie del género supere a esta algún día.

«Carnivále»: La más extraña, con diferencia, el bien y el mal, repleta de momentos escalofriantes, de situaciones que no te explicas, lenta, extremadamente lenta en ocasiones, embrujadora, se te mete dentro, te gana sin reservas, además está muy bien cerrada la trama, a pesar de ser una de las canceladas antes de tiempo, por los mismos motivos de siempre, el alto presupuesto, no es esta la serie que recomendaría a cualquiera, eso por supuesto, es más, es de las series que ni recomendaría, creo que está hecha para quien se tope con ella como quien se topa con un carromato abandonado por un circo ambulante, hay que estar destinado a verla.

«A 2 Metros Bajo Tierra»: Si «The Wire» cambió mi forma de ver el mundo podríamos decir que «Six Feet Under» cambió la manera de verme a mí mismo, nunca antes una serie de televisión me había hecho plantearme mi propia vida, la serie más cabrona de todas, con diferencia, la que más te hace pensar, la que más habla de la propia vida, a pesar de tener a sus personajes rodeados permanentemente de la muerte, nunca antes habías vivido en una funeraria, tras ver la serie puedes decirte que ahora sí, ¿drama?, ¿comedia?, no sé, ¿realismo?, tampoco lo sé, una ve leí que ver esto es como leer un libro, quizá sea la más literaria de todas, la más filosófica, la más engañosa sin duda, parece que no te ofrece nada, que es un pasar de escenas con algún que otro diálogo brillante, pero lo dicho, tiene un peligro dentro, algo que hoy en día no se lleva en absoluto, te hace pensar.

Quedarían otras, pero tampoco es cuestión de cansarte, posdata entonces, Harmony, suecos, metal cristiano, con sus toques progresivos, de los que de entender la letra posiblemente no escucharía, de su último álbum este «Inner peace», en el que tienen como colaboración a Daniel Heiman, toda una gran voz.

«Roma», la serie y la historia.

«Roma» es una de las series que más me han gustado de todas las que servidor ha podido ver, hasta el punto de haberla visto en su totalidad en tres ocasiones, es una gran serie, muy realista a la hora de tratar cómo era realmente la sociedad romana de la época, pero tiene grandes fallos.

Esos fallos son cometidos «a posta», no por falsear la historia, sino porque es serie de ficción, no documental, y a la hora de perfilar la historia se obviaron algunos acontecimientos y se modificaron otros, así como personajes etc., la serie contó con bastantes asesores históricos, no fue algo que se hizo a la ligera, pero como digo se cambiaron cosas para darle verosimilitud, que no exactitud, a la historia, a la vez que no se resintiera el ritmo de la serie, que vuelvo a recordar, es una historia de ficción.

Empezamos con los dos protagonistas, Lucio Boreno y Tito Pullo, citados por César en sus memorias de las guerras de las Galias, pero que no tuvieron tanta interactuación en los sucesos históricos que se narran en la serie, es más que posible que ni siquiera tuvieran relación alguna con los Julios, Junios y demás, es decir, Pullo no fue una especie de «educador» de Octavio, ni el padre de Cesarión, ni Boreno estuvo presente en la muerte de Marco Antonio ni ambos dejaron escapar a Pompeyo, ni ayudaron a comenzar la Guerra Civil ni nada de lo que ambos hacen en la serie.

Rome

Atia, otro pilar de la serie, aparece en esta como viuda, al menos no sabemos que salga marido alguno, bien, si bien es cierto que el padre de Octavio había muerto sí que sabemos que Atia se volvió a casar y que fue el padrastro de Octavio quien le crio, pero la propia presencia de Atia en la serie es una licencia histórica, ya que murió poco después que César, con lo que en la segunda temporada no debiera ni de haber aparecido.

Muchos personajes históricos que sí existieron son obviados en la serie, entre otros el padrastro de Octavio como hemos dicho, así como diversos familiares de César, Marco Antonio y demás familias patricias, también son obviadas batallas y otras, como Filipos, son resumidas en una cuando en realidad fueron dos, tampoco fueron como se cuentan en la serie las muertes de los dos comandantes de las tropas de la República en esa batalla, ni la de Casio ni la de Bruto.

Más, Octavio Augusto no estaba en Roma cuando su tioabuelo César murió, y no era tan bisoño, era parte del ejército y con este estaba en la actual Albania, sí que es cierto que Marco Antonio no le reconoció como sucesor ni le dio poderes, pero cuando esto sucedió Octavio todavía no había regresado a Roma.

Marco Antonio antes de casarse con Octavia, la hermana de Octavio, por motivos políticos, cosa que sí era verdad, ya estaba casado, cosa que se obvia en la serie, y su hijastra estuvo casada también con Octavio, cosa que tampoco aparece, nada aparece tampoco de sus campañas contra los partos y como toda la historia real se resume todo y se mezcla, sí que parece bastante real su muerte, aunque no fuera con Boreno como testigo, sí que se suicidó más o menos como sucede en la serie, mas en la vida real parece que cuando Cleopatra le ve aun está vivo.

Servilia es la gran rival de Atia, bien, en la serie aparece como viuda y madre de Bruto, mas en la realidad tuvo más hijas, hasta tres, que se casaron con personajes de la serie, cosa que también se obvia, como Lepido, el tercer miembro del triunvirato, o Casio, compañero de su hijo Bruto en la muerte de César y posterior exilio, en la serie se suicida frente a la casa de Atia, cosa que no sucedió en realidad, obvio, puesto que Atia ya estaba muerta como hemos dicho, en realidad Servilia murió de muerte natural.

Bruto, el hijo de la anterior, también estaba casado, cosa que no se adivina en la serie, en esta aparece Bruto casi obligado a integrarse en la trama anticésar, cuando en realidad parece que fue uno de sus principales instigadores, y desde luego la famosa frase de «Tú también hijo» que sí que parece que se dijo en realidad no aparece en la serie.

Octavia, fue ofrecida a Pompeyo como esposa y rechazada, eso fue verdad, al igual que el que ya estaba casada, pero como otro hombre, no el que aparece en la serie, y tenía ya tres hijos, tuvo dos con Marco Antonio, en la serie solo una niña, y sí que ejerció de esposa de este y no su madre, entre otras cosas porque ya hemos visto que la madre murió bastante antes que en la serie.

Catón aparece en la serie como un anciano, en realidad era mucho más joven, en la cuarentena, se suicidó sí, pero no como sucede en la peli, sino de una forma algo más escatológica, arrancándose los indestinos.

En fin, que son muchas más las inexactitudes de la serie, sus olvidos y sus invenciones, pero como digo todo se hizo «aposta», en virtud del ritmo de la serie y primando que se diera una imagen real sobre todo de la vida en la ciudad de Roma, cosa que sí consiguió, siendo de lo más realista que el cine y la televisión nos ofrece al respecto, tómate esto pues como curiosidad más que otra cosa.

Para la postdata Nightwish, «The Escapist»

De romanos pintando nabos en una pared.

Quisiera hablaros de Roma, o «Rome» en su versión original, esa serie histórica que durante 22 episodios nos traslada a la Roma de Julio César, Marco Antonio y César Augusto, la época en la cual la centenaria República Romana desapareció para dejar paso al Imperio, Roma es una de las más afamadas series de la HBO, aunque en realidad es una coproducción de esta con la BBC británica y la RAI italiana.

Rome

Es, como tantas otras series y películas históricas, todo un cúmulo de inexactitudes y falsedades, pero “aposta”, es decir, no es que se cometieran errores, sino que se cambió la historia para darle a la serie un guión determinado, recordemos siempre que no hablamos de un documental, hablamos de ficción, y una cosa, a pesar de esos “errores” es quizá la serie que con mayor rigor ha mostrado la sociedad romana de la época. ¿Cómo es posible?, porque al contrario de lo que sucedería de haberla rodado los responsables de «Hispania» hay mierda en las calles, mierda en las ropas de los pobres, que no parecen recién sacados de la representación histórica local de Villaconejos de Enmedio, como es regla en HBO la ambientación es de lujo, cuidando los detalles al máximo.

«Roma» nos muestra la sociedad de la época sin tapujos, sin el error fácil de tratarlos con la moralidad de hoy en día, los romanos eran gente que se follaba a sus mujeres delante de sus esclavos para que estos les abanicaran, gente violenta, sociedad violenta, corrupta, donde una vida vale lo justo, todo eso la serie nos lo cuenta con minuciosidad, retratando la ciudad muy creíblemente.

La historia es entretenida, los hechos históricos a grandes rasgos pasaron así, o al menos parece ser que pasaron así, con las consabidas licencias históricas que antes comenté. Pero el gran acierto de la serie son sus personajes, mostrados con sus virtudes y defectos, unos te caen mejor, otros peor, pero no hay personajes sin defectos ni personajes sin virtudes, gran culpa de lo bien que están los personajes es lo tremendos que están todos los actores, lo malo del tema es que ahora, a partir de ver «Roma» siempre pondrás la cara de estos actores a los personajes históricos, enorme Atia (Polly Walker), enorme su eterna enemiga Servilia (Lindsay Duncan), qué decir de Julio César (Ciarán Hinds), de Marco Antonio (James Purefoy), de Cleopatra (Lynsdey Marshal), de Bruto, de Cicerón (David Bamber), de Octavio (Max Pirkis y Simon Woods), de Casio (Guy Henry), de Mecenas (Alex Wyndham), de Octavia (Kerry Condon), de Pompeyo (Kenneth Cranham) y Catón (Karl Johnson), de Agripa (Allen Leech)…. sus luchas, sus rivalidades, sus frágiles alianzas, todos soberbios, todos mostrados lo más humanamente posible, siempre hablando de la humanidad de la época claro, hombre, a mí el que interpreta a Bruto, un tal Tobias Menzies, me da un poco de grima, pero es la excepción.

Pero el peso de la trama la comparten como he dicho con nuestros legionarios favoritos, Lucio Boreno (Kevin McKidd), creyente hasta la médula, sus problemas conyugales, su ascenso hasta la cima y su descenso al infierno personal, su mujer, con su secreto a voces, sus hijas, su etapa en la incipiente mafia romana, de cuyos actos, por entonces normales hasta cierto punto hoy nos asquearíamos.

Y qué decir de Tito Pullo (Ray Stevenson), asesino, sanguinario, mujeriego y bebedor, pero a pesar de eso cuando acabe la serie te sentirás identificado con él hasta el extremo, de la férrea amistad entre Boreno y Pullo seremos testigos de principio a fin de la serie, sus andanzas, sus desventuras, sus problemas mutuos…. ambos nos brindan alguna de las mejores escenas de la serie.

Lo dicho, 22 capítulos llenos de intriga, peleas, sangre, sexo, más peleas, más intrigas, folleteos, enculamientos, actos lésbicos, incesto, miembros amputados, traiciones, besos (de vez en cuando dejan sitio a la mariconería, sí ), venganzas, esclavos en pelotas, aventuras, política con mayúsculas, credibilidad, verosimilitud y a veces asesinatos y polvos.

Una pega, llevar este proyecto a la pantalla valió un dineral, dicen que es de las series más caras de la historia, lo que entre otras cosas imposibilitó que se prolongara, a pesar del dineral gastado se echa en falta algo más de batalla, salvo una, Filipos, en la segunda temporada se pasa por encima de ellas, un pequeño problemilla casi sin importancia.

«Handful of Pain» es el tema elegido para la postdata, potente y cañero, representativo del estilo de Helloween sin duda alguna.

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