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Este bacalao es digno del mismo Jehová.
¿Qué es una buena película?, ¿qué es una mala película?, incluso de «El Padrino» hay quienes opinan que es un auténtico bodrio, y hablamos de la peli más afamada de la historia, de las que aparecen en todas y cada una de las listas de «10 mejores películas» de cualquier página dedicada al cine, ya si pasamos a la comedia, al lado más cómico del cine la cosa se complica, ¿qué es una buena película «de risa»?, si es eso, de risa, se supone que lo es aquella que nos hace reír, para mí las de Esteso y Pajares, por ejemplo, me hacían mucha gracia, me siguen haciendo mucha gracia, quizá con eso baste, si hace reír es buena, a cuanta más gente haga reír mejor es, pero además de hacer reír bien pudiéramos exigirle a esa peli de risa un poco de originalidad, de escapar del chiste zafio, inteligencia y por qué no, un poco de provocación, yo lo tengo claro, si me preguntas cuál es mi peli «de risa» predilecta la respuesta sería «La Vida de Brian», o «Life of Brian».
No habrá, supongo yo, quien no conozca a los Monty Python, Eric Idle, Michael Palin, John Cleese, Terry Gilliam, Terry Jones y Graham Chapman, saltaron a la fama en 1969 con «Monty Python’s Flying Circus», un espacio de humor en el que mostraban sus credenciales, irreverencia, humor absurdo, originalidad máxima, su éxito fue rotundo, a partir de ahí libros, películas, series, programas de radio, prácticamente no hubo medio que se escapara de su hacer, considerados como uno de los referentes del humor de las últimas décadas del Siglo XX, sin duda han creado estilo y han sido imitados hasta la saciedad, se disolvieron a mediados de la década de los ochenta, pero siguieron sus carreras colaborando entre ellos a título individual, «Un Pez Llamado Wanda», «Las aventuras del Barón Munchausen» o «Erik el vikingo» son alguna de las pelis de esta etapa de divorciados.
Pero sin duda la mayor huella que han dejado como grupo fueron sus largometrajes, cinco, de los cuales tres están entre las pelis referencia del cine de humor, «Los caballeros de la mesa cuadrada y sus locos seguidores» (1975), «El sentido de la vida» (1983) y la que nos ocupa, «La Vida de Brian», de 1979, dirigida por Terry Jones y con la totalidad de los miembros en el reparto, todos, excepto Graham Chapman (Brian) haciendo varios papeles, junto a ellos Sue Jones-Davies.
Rodada no sin problemas, ya que su patrocinador original, EMI, se negó a financiarla por considerarla su presidente como obscena y sacrílega, contó con el apoyo financiero de George Harrison, de los Beattles, la historia es bien conocida, Brian es confundido nada más nacer con Jesucristo y, aunque se resuelve el error, años más tarde es vuelto a tomar como el auténtico Mesías.
Película desternillante de principio a fin esta, yo sinceramente me la habré visto como 15 veces y aun cuando la vea por decimosexta vez seguiré descojonándome, porque sí, hace reír, que es lo principal de una peli de humor, pero es que además lo hace de una manera inteligente, con escenas llenas de ese humor absurdo que caracterizó a los Monty Phyton, es además tremendamente atrevida e irreverente, totalmente fiel a su filosofía, es también, a pesar de ser cómica, una peli crítica, que se presta a muchos paralelismos con situaciones actuales, fanatismos religiosos, nacionalismos, clases sociales, eso sí, buscando siempre el lado más optimista de la vida, porque aunque tú creas que por ser maltratado, apaleado o escupido estas jodido siempre habrá un viejo en la misma celda colgado boca abajo que te llamará suertudo.
Quedarte con una escena de «La Vida de Brian» es como escoger a uno de tus hijos, hay para mí una «especial», aquella en la que el «Frente Popular de Judea» está reunido y una patrulla de romanos llama a la puerta, se esconden de aquella manera, el viejo dueño de la casa abre la puerta y entran un porrón de soldados a registrarla, quedándose el viejo y el jefe de los soldados en la puerta manteniendo una conversación acerca de los diferentes modos de ajusticiar a una persona, la escena derrama hilaridad y absurdez por todos los lados, eso sí, en el registro un soldado encontró una cuchara.
¿Conoces la pena para los que dan cobijo a los perseguidos por el Imperio Romano?
– NO
– Es la crucifixión!!
– Ah, podía ser peor…
– ¿Que podía ser peor? ¿Estás loco?
– Sí, por lo menos es al aire libre
O esa en la que el mismo frente está reunido y tras arduas discusiones llegan al acuerdo de que aparte del alcantarillado, la sanidad, la enseñanza, el vino, el orden público, la irrigación, las carreteras y los baños públicos los romanos no han hecho nada por ellos, o esa discusión final entre los crucificados acerca de el poder o no poder ser atados a la cruz en compañía de samaritanos, galileos o judíos, que el romano arregla con un «el que no esté de acuerdo con el sitio que le ha tocado que levante la mano».
Momento mítico también cuando el Poncio Pilatos habla de su amigo Pijus Magnificus con su peculiar acento, descojonante cuando menciona a la esposa de este, Incontinencia Suma, o cuando va citando el nombre de los presos a liberar con el público literalmente por los suelos de la risa, o cuando uno de los seguidores de Brian le dice que él es el auténtico Mesías, que ha seguido muchos y tiene experiencia en ello, por no hablar de los encontronazos del Frente con sus rivales locales, los «disidentes», o cuando el centurión romano le pilla a Brian haciendo una pintada, tras corregirle le insta a escribirlo cien veces 😀
Pero por poner una, quizá de las más conocidas, la de la lapidación, brillante, sin duda alguna:
La peli levantó ampollas en su momento, a pesar de la casi nula presencia de Jesucristo en ella la Iglesia no se tomó demasiado bien que se hiciera esta comedia acerca de su figura, ya sea directamente o usando la figura del Mesías confundido, aunque hay que decir que conozco muchos católicos, practicantes, creyentes al extremo, que no sólo no se molestaron al verla, sino que la tienen entre sus favoritas, quizá es que hay que tomarla como lo que es, una simple comedia, quizá su gran virtud es tomarse a chanza prácticamente a todos los segmentos de la sociedad actual haciendo sus correspondientes paralelismos en la Judea de la época, algo, que salvando mucho las distancias, vi también en las primeras temporadas de esa genial (por entonces) «Vaya Semanita» de la ETB, porque piénsalo bien, ¿quién queda peor?, ¿los romanos?, ¿los grupos de resistencia locales?, realmente no dejaron títere con cabeza.
Sin duda alguna si vamos escena a escena podríamos sacar alguna frase, alguna situación, de todas ellas que nos hace reírnos a base de bien, sólo espero que si la has visto te hayan entrado ganas de volverla a ver, si aun no has tenido ocasión de ver esta maravilla no sé qué haces leyendo esta mierda de blog, estás perdiendo un tiempo precioso, yo sólo doy gracias a ese grupo de comediantes por darnos esta auténtica joya del humor.
Brother Firetribe cerrando la entrada, estos melódicos suecos, que ya han salido por aquí, «Who will you run to now» el tema:
«Falling Skies», simplemente abochornante.
Antes de empezar dejar constancia de mi alegría al enterarme que en enero se estrenará «Spartacus: Vengeance», la nueva entrega de las aventuras de Espartaco y sus colegas gladiadores, sus mutilaciones y sus jodiendas, y con más reservas celebrar que es posible que la HBO lleve a la pantalla «La Torre Oscura», la serie de novelas del mítico Stephen King, pero al lio.
Hacía tiempo que no veía una serie con tanto personaje tan ahostiable como “Falling Skies”
He visto series que no me han gustado, por la temática («Treme»), porque la historia me resulta aburrida («Big Love»), pero al menos estas tenían cosas salvables, entre otras la verosimilitud, la credibilidad de la historia y los personajes, tenía actores y actrices, “Falling Skies” es quizá la serie más mierdosa que servidor se haya echado a la cara, claro, ahora entiendo cuando dicen que las series españolas están a la altura de las extranjeras, se deben de referir a esta.
El engendro de serie este es una producción de Dreamworks (Spielberg), para TNT, en España además la han dado en Cuatro, el que aparezca como productor ejecutivo el Spielberg puede sonar a reclamo, pero lo cierto es que en la serie se nota su mano, se nota que hay tela invertida en los efectos especiales (el lado bueno) y se nota la moralina vomitiva que desprende casi cada plano (el lado malo), el cénit es cuando la mejicanita dice esa frase de “no le pido a Dios que haga nada por mí, sino que me diga qué puedo hacer por él”, acojonante, la serie está repleta de valores similares, padres amantes de sus hijos, hijos amantes de sus padres, y si no lo son es por culpa de los aliens.
El más claro ejemplo es el prota, el profe universitario, padre modelo, hombre comprometido con la causa, inteligente, valiente, carismático, experto en casi todo, es el típico al que si le preguntas por su mayor defecto te diría eso de “pues que soy demasiado bueno”, este tipo tiene tres hijos a cual más repelente, tiene una especie de amiga con la que se nota que hay rollo, pero no espereis aquí nada de sexo no, es una serie familiar, matan sí, pero nada de tetas, ni siquiera muslamen, la violencia es asumible, pero es que los aliens son tan malos que se lo merecen, en vez de liarse como lo haría cualquier persona normal estos dos cada vez que se juntan en un plano parece que vayan, en cualquier momento, a ponerse a cantar “la paz esté con nosotros”.
Todas las minorías y espectros de la sociedad representados, hay negros, asiáticos, mujeres de armas tomar, homosexuales, ah no, de estos no, que son pecadores, tampoco curiosamente ningún musulmán, que seguramente estén colaborando con los bichos del espacio, son todos superlistos que se han tragado todas las temporadas de «CSI» y similares y descubren las cosas a la primera, para colmo, meten un personaje medianamente interesante, el Pope ese (manda cojones con el nombrecito), y enseguida se le echa a perder sacando su vena de solidaridad y sacrificio por las buenas gentes de la Tierra.
Lo más cojonudo es que seguramente su pase por Cuatro haya sido un éxito, me dijeron que era como «The Walking Dead», cambiando zombies por extraterrestres, ni puto caso, aquella al menos tenía su rollo, esta es mucho más indignante.
El reparto, encabezado por Noah Wyle (Urgencias), Moon Bloodgood (El Guía del Desfiladero), Drew Roy (miembro de la aclamada por la crítica Hanna Montana) o Will Patton (Armaggedon), ciertamente tampoco es que por aquí se vaya a salvar la cosa.
Postdata, hace algún tiempo lei que Brother Firetribe era de las pocas bandas que seguía ofreciendo hoy en día estribillos poderosos, pegadizos, quizá sea esa la seña de identidad de estos fineses a los que en algunos sitios se les cataloga como AOR, en otros Hard, en otros como Anís del mono… en fin, fundada por Pekka Ansio Heino y el Nightwish Emppu Vuorinen, desde luego tienen calidad de sobra, ejemplo este «Out of my head», gran tema, rítmico y potente.