Donde esté una buena corrida que se quite el fútbol.

Danioska, ay Danioska, estaba ella ahí en su blog, como pensándose la cosa, ¿qué cosa?, pues si es mejor o no el fútbol que el frote, el folleteo, el sexo, uno asombrado leía y leía argumentos y no cabía en sí de eso, del asombro, y me dice: «Bueno, tendrás q escribir tu propia apología del sexo por sobré el fútbol, querido».

Resaltemos lo de «querido», que importa y mucho, bien, en fin, que a eso voy, en realidad es que es muy fácil, esto de defender el sexo ante el fútbol, a no ser claro, que lo miremos desde un punto de vista como en el del famoso chiste: ¿tú qué prefieres, el sexo o las olimpiadas?, pues las olimpiadas, que son más a menudo.

Ahm, que se me ha roto el teclado y va mal, el corrector de word intentará remediarlo, pero si ves alguna palabra chunga que sepas que hay una razón.

Seamos serios, nadie, en su sano juicio, prefiere el fútbol al follar, me vas a comparar ver a 22 tíos en calzones corriendo detrás de una pelota a 22 tías en bragas corriendo detrás de tus pelotas, no hay color, vale, un partido de fútbol dura más, a ti te sobran 21, lo que quieras, pero lo bueno si breve dos veces bueno, que estoy harto de repetirlo a la parienta y no hace caso.

Lo malo del asunto no es que nos guste más el fútbol, no, es eso, que está más a mano, tienes fútbol casi a diario, es caro, si vas al campo, como es caro el sexo, si vas al Lola´s, pero por la tele te hartas a ver fútbol, y sin embargo no te hartas a mojar, ¿por qué?, por la fragilidad.

No es que el sexo sea frágil de por sí, depende, pero sí que es muy frágil el mismo hecho de tener sexo, cualquier contratiempo sin importancia te lo jode, ejemplo, real, como la vida misma, comunión, de mi sobrinito, sábado, madrugar, peluquerías (para ellas obviamente), maquillaje (para ellas huelga decirlo), coche, todos puestos, elegantes, como manda la cosa, llegamos a la iglesia, cerrada, mosqueo, me equivoqué de iglesia, coño, llamo por teléfono a ver cuál es, me dicen que esa, qué coño esta, que está cerrada, normal idiota, que la comunión es mañana…

¿Tú te crees que esa pequeña equivocación hizo que se mosqueara la parienta y me quedara sin frote?, joder, un error lo tiene cualquiera, pues sí, me quedé sin polvo y en su defecto vi el fútbol, pero no porque me gustara más, es que encima según me echaba la bronca me dio por descojonarme, porque me hacía gracia la cosa qué cojones, qué poco sentido del humor.

Otro día, estaba yo con la niña tendiendo la ropa, es para que veas qué fácil es que se te joda el polvo, braga de niña pequeña, dame una pinza hija, bragas de niña mayor, ¿cuántas aita?, dame una pinza hija, que aun tienes poco culo, cuando toquen las de tu madre ya te pediré media docena.

Y ahí la cabrona de la cria, «amaaaaaaaaaaaaa amaaaaaaaaaa, mira lo que ha dicho aita», a tomar por culo, otra vez a ver el puto fútbol de los huevos, el fútbol, la tertulia de intereconomía y el especial tarot de madrugada, porque del sofá no me moví en toda la noche.

Así que sí, para cuando quieres echar uno cómo lo aprecias, como para no, es que cuando hablan de tasas bajas de natalidad me asombro, para lo que se folla hay superpoblación, venga ya, lo malo es que es un círculo vicioso, como apenas entrenas en cuanto sales al campo te desfondas, normal, si se lo tengo explicado, ¿Acaso a Messi se le podría exigir algo de jugar un partido casa seis meses?, no, le faltaría ritmo de competición, a mí me pasa igual, déjame jugar todas las semanas y la champions los miércoles y ya verás cómo cumplo, pero si no me convocan ni de casualidad pues eso, salto al campo y ya estoy pidiendo el cambio.

Pero en definitiva, que no, que el sexo siempre será mejor que el fútbol, que los toros, que comer una mariscada, incluso que ver el Tour, a ver, siempre hay excepciones, pienso en mi suegro y entiendo que se abonara a canal + liga, normal, yo me vería hasta la liga zimbabwesa.

Aina para la posdata, esto en principio iba a ser un supergrupo tipo Avantasia, una ópera metal de esas, lo malo es que se les olvidaron las guitarras, de lo poco potable de su último y primer disco, «Days of Rising Doom», este «Oriana’s Wrath»